25 de marzo de 2011

Para ESTO, has nacido

La siguiente reflexión va dirigida a todos aquellos que están involucrados en la difusión de la Palabra de Dios.

Para aquellos que han comprendido la importancia del compromiso cristiano en el mundo...

Para aquellos que saben que el cristianismo no se trata de ser un calienta bancas, sino de un servicio constante a Dios en todo momento y lugar...

Para aquellos que están conscientes que han venido al mundo con un propósito diseñado por Dios desde toda la eternidad...

Tú eres esa persona...



Recuerda que la labor que desempeñas, no te ha sido dada por ningún ser humano, sino que te ha sido dada por Dios...

Dios te ha dado la capacidad y los recursos para desempeñarla, pese a tus constantes debilidades...

Ha sido Dios quien te ha abierto esas oportunidades que estaban totalmente cerradas...

Ha sido Dios quien te recuerda día con día, la necesidad de mantenerte fiel en ese enorme privilegio recibido por gracia y no por tus meritos...

Tu estas consciente de todo lo leído...
Lo sabes muy bien...
Te ves incapaz en todo aspecto...
Por eso clamas desde tu debilidad e incapacidad...
Reconoces que necesitas del poder de Dios, para seguir cumpliendo la labor por la que has venido al mundo...
No te sientes conforme...



Entiéndelo...
Es el poder sobrenatural del Espíritu Santo en ti quien te dará:

1. Conviccion sobrenatural del mensaje del Evangelio.
2. Solidaridad y sensibilidad hacia las demás personas.
3. Capacidad de iluminar con tu testimonio de vida.
4. Valor para enfrentar todo tipo de oposición.



Convicción sobrenatural del mensaje del Evangelio...

Tu mente quedara subordinada bajo la influencia iluminadora del Espíritu...
Tendrás una comprensión profunda del contenido de la Sagrada Escritura y un celo indescriptible para que sea difundida por todas partes.

Solo una persona con convicciones firmes en lo que cree, es capaz de cumplir incondicionalmente con la misión encomendada por Dios.
Se necesitan profundas convicciones...
Ver al respecto lo que escribió el apóstol Pablo en 1 de Tesalonicenses:

Porque nuestro evangelio les llego no solo con palabras sino también con poder, es decir, con el Espíritu Santo y con profunda convicción.
I Tesalonicenses 1:5



Solidaridad y sensibilidad hacia las demás personas.

Tus emociones se verán gobernadas por los mismos sentimientos de Cristo.
Sentirás una plena identificación hacia las personas que están hundidas en el pecado, con aquellas que sufren ante las diversas necesidades que les aquejan...
Sentirás la necesidad imperativa de hacer algo por ellas, sin importar riesgos...
Experimentaras la misma compasión que Jesús tuvo al ver las multitudes, así como lo atestigua Mateo:

Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor.
Mateo 9:36



Capacidad para iluminar con tu testimonio de vida.

El Espíritu Santo te dará la capacidad de reflejar espontáneamente una conducta que vaya acorde con un estilo de vida apegado a las normas éticas y morales establecidas por nuestro Señor Jesucristo...
Una persona así, sirve de motivo para que otras personas sientan la necesidad de buscar a Dios y de imitar tales conductas...

Con relación a esto, dice nuestro Señor Jesucristo:

Su conducta debe ser como una luz que ilumine
Y muestre como se obedece a Dios.
Hagan buenas acciones.
Así las verán los demás y alabaran a Dios,
El Padre de ustedes que está en el cielo.
Mateo 5:16.



Valor para enfrentar todo tipo de oposición…

Ser verdaderos cristianos en estos tiempos es difícil, debido a la influencia maléfica, materialista e inmoral que abunda en el mundo actual...

Ser verdadero cristiano hoy, implica ir contra la corriente del mundo y para eso se necesita mucho valor para darse a conocer como tal…

Al respecto dice nuestro Señor Jesucristo:

En este mundo afrontaran aflicciones, pero anímense Yo he vencido al mundo.
Juan 16:33




Convicción, Solidaridad, Sensibilidad, Testimonio de vida, Valor...

Son elementos indispensables en el desarrollo de tu responsabilidad en el mundo de hoy...
No se pueden obviar…

Recuerda que para esto has venido al mundo:

Ser un medio de difusión de la Palabra de Dios...
Continua haciéndolo, pero buscando siempre la presencia revitalizadora del Espíritu Santo en oración constante...

José Alfredo Lievano

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