2 de septiembre de 2009

Empieza Y nunca te rindas


Prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús. (Filipenses 3:14) 

Alguna vez Dios te ha indicado que debes hacer algo, y tenias la intención de hacerlo, pero, todavía no lo has hecho? Las buenas intenciones no se traducen en obediencia. No has obedecido hasta que hayas hecho lo que Dios te pidió. Te animo a empezar a moverte en la dirección correcta. A orar acerca de tus metas. Si no tienes una definida, búscala y mientras tanto, asóciate con alguien que tenga una meta, un propósito.  
 
Acércate a una persona de propósitos claros y metas altas, y quizás llegues a imitarle.
Comienza a moverte en la dirección adecuada. Habla cosas positivas acerca de ti y de tu vida; cree que Dios te puede utilizar. Se entusiasta! Es mejor que estar aburrida! Si Dios te ha dado una visión, debes comprometerte a realizarla, guiada por el Espíritu Santo. Establece metas a corto y largo plazo y entonces acércate hacia esas metas diariamente en oración y en acción. Las visiones no se realizan en un solo día, así que tienes que tener paciencia, y seguir avanzando, aunque no haya evidencia visible del éxito por mucho tiempo. 

Empieza y no te rindas! 

Haz esto:
Empieza a moverte en una dirección positiva. Da pasos de obediencia. No tengas solamente buenas intenciones. Se un hacedor de la palabra.




No hay comentarios: